|
EditRegion5
DIETA
DISOCIADA
Siempre es
necesario ofrecer una alternativa, en la medida en que no todas las personas
son iguales y no todas son capaces de afrontar los mismos compromisos
y con los mismos resultados: hay quien lo consigue y quien fracasa, quien
pierde y quien gana. Para quien haya fracasado en el intento con una dieta
hipocalórica equilibrada existe una última alternativa:
la dieta disociada. Para entendernos, la culpa del fracaso de una dieta
hipocalórica equilibrada no recae sobre ésta, sino sobre
el sujeto, ya que, si se sigue una pauta basada en reglas sanas, un adelgazamiento
bien programado es matemáticamente seguro.
Hay que
admitir que el tratamiento dietético es difícil porque,
aparte de los numerosos problemas psicológicos ya analizados que
pueden obstaculizar cualquier intento de reducción pondera¡,
existen muchas tentaciones y ocasiones para cometer errores.
Hay sujetos
que no aguantan ninguna forma de restricción y que reaccionan negativamente
frente a todo régimen que contemple el uso de pesos y de medidas
en lugar de la libre elección de la calidad y de la cantidad de
los alimentos.
existen
sujetos armados de la mejor voluntad, deseosos de llevar enseguida a la
práctica las sugerencias del experto en dietética, que juran
que serán constantes en su empeño, pero que luego se comportan
de forma confusa y superficial, lo hacen todo deprisa y se olvidan de
las advertencias más elementales.
Existen
sujetos que empiezan bien, impulsados por la novedad y por el rápido
descenso de la aguja de la balanza, pero que tras el entusiasmo inicial
se ven superados por el aburrimiento y el cansancio debidos al autocontrol
continuo, a las severas restricciones, a la dieta monótona.
Pues
bien, para los impacientes, los incumplidores, los chapuceros y los débiles
existe una última esperanza y una última prueba:
Mantener el peso ideal no siempre resulta fácil, porque no todos
se adaptan a la obligación de calcular continuamente las calorías
introducidas para mantener siempre la correspondencia entre éstas
y las necesidades orgánicas, aunque el número de calorías
diariamente permitido es alto y permite una mayor elasticidad en la distribución
diaria de los alimentos. No obstante, siempre es necesaria la referencia
continua a la tabla de calorías, para evitar antiguos errores y
no recuperar así el peso perdido a precio de tantos sacrificios.
Por ello, pensando en las personas que consideran dicha labor demasiado
aburrida y pesada, se ofrece la oportunidad de seguir la dieta disociada,
que evita los numerosos inconvenientes de una dieta calóricamente
controlada y permite una mayor libertad de elección.
En
que consiste?
0 ocurre a menudo que el problema pondera¡ es muy concreto. Se trata
de sujetos obesos "leves", que buscan un adelgazamiento rápido,
por razones:
- deportivas (cuando deben atenerse a un peso para responder a una determinada
categoría: boxeadores, yudocas, saltadores, luchadores);
- profesionales (bailarinas, modelos, jockeys, actores);
- sociales (cenas de gala);
- económicas y de vestuario (ropa que se ha quedado demasiado estrecha).
Cuando la razón del deseo de adelgazar es fundada, antes de dejar
que el sujeto cometa locuras, corra inútiles riesgos de agotamiento
de sus depósitos hídricos (diuréticos, saunas) o
se someta a una dieta radical y perjudicial para su equilibrio psicosomático,
es conveniente recurrir durante dos o tres días, bajo cobertura
vitamínica y mineral (legumbres verdes), a un aporte de 1,5 g de
proteínas/kg. a la hora habitual de las comidas, con un mínimo
de medio litro de agua en cada comida. El adelgazamiento así obtenido
se basa únicamente en la masa grasa y no ataca al capital nitrogenado.
Para seguir este método, dado que ningún alimento corriente
es estrictamente proteico, conviene emplear los alimentos dietéticos
ya preparados que aportan exclusivamente proteínas de gran valor
biológico, lo cual garantiza la eficacia real a corto plazo.
No obstante,
estos tratamientos, aunque sean de corta duración y no presenten
inconvenientes, no deben repetirse demasiado a menudo.
La dieta disociada no se basa en la limitación de la cantidad de
alimentos, sino en su distribución en las veinticuatro horas del
día.
El desayuno puede ser libre o sólo de fruta y el almuerzo a mediodía
es una comida hiperglucídica en la que se permite el consumo a
voluntad de pan, pastas, arroz, patatas, farináceos, azúcares
y legumbres, excluyendo totalmente los alimentos hiperproteicos como carnes,
pescados, huevos, leche y quesos. La cena, hiperproteica, debe ser exactamente
lo contrario, es decir están permitidos en ella a voluntad carnes,
pescados, huevos, leche y gI]esns, y totalmente prohibidos los hidratos
de carbono como pastas, pan, arroz, patatas, farináceos, azúcares
y legumbres.
Está
rigurosamente prohibido invertir el orden, es decir comer para desayunar
lo que está permitido para la comida y viceversa:
una cena rica en hidratos de carbono es perjudicial para una buena funcionalidad
hepática, puede contribuir a aumentar los valores de colesterol,
de los ácidos grasos y de la lipemia, puede dificultar el reposo
nocturno y ser responsable de pequeños malestares matutino, Una
boca pastosa, lengua sucia, mal aliento, cefalea y cansancio.
CUÁNDO
RESULTA úTIL
Ya hemos dicho que la dieta disociada no ofrece garantías en lo
referente a una eventual recuperación de peso, en la medida en
que dicha dieta es distributiva, no cuantitativa, es decir impone una
distribución de los alimentos a lo largo del día, pero deja
libertad en cuanto a la cantidad. La dieta disociada resulta muy útil
sobre todo para quienes suelen comer fuera de casa. Sin hallar dificultades
y sin despertar comentarios o curiosidad, a mediodía pueden pedir
de primer plato pasta o arroz y de segundo un abundante plato de ensalada
mixta con un poco de aceite; por la noche, de primero, un abundante plato
de ensalada mixta condimentada con un poco de aceite y, de segundo, carne
o pescado y huevos o queso.
La
dieta disociada, seguida con precisión, puede ofrecer
resultados satisfactorios: quienes deben mantener el peso pueden así
no ganarlo y quienes han fracasado con otras dietas pueden adelgazar en
razón de unos 70-80 g al día, es decir unos 2,5 kg. al mes.
SECCIÓN
DE DIETAS
- RÉGIMEN FÁCIL
|
|
|
|